D.C.F. M.H.D. E.D.F. L.D. y C.P.C. Martha Elizabeth López Vázquez.
Presidenta de la Comisión de Compliance.
Metropolitan Region Chair Integrity & Compliance G100 México
Presidenta de la Federación Iberoamericana de Compliance y Sostenibilidad
Doctora en Ciencias de lo fiscal, Licenciada en Derecho,
Maestra en Compliance por la Universidad de Nebrija, Madrid, España.
El 10 de octubre, día mundial de la “salud mental”, según la Organización Mundial de la Salud, Organismo de la ONU, la define como un estado de bienestar en el cual una persona es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida, trabajar de manera productiva y contribuir a la comunidad, abarca aspectos como bienestar emocional, psicología social, siendo fundamental en la calidad de vida. La OMS también señala que no solo es ausencia de trastornos mentales, sino que implica un equilibrio de los aspectos psicosociales que afectan a las personas. Además, se pronuncia por la importancia de la promoción de la salud mental y la prevención de trastornos, así como el acceso de salud mental para todos.
Sin embargo, en el concepto de salud mental también es importante referirse a algunos pensadores y cómo ha evolucionado el concepto a lo largo de los años, con estos pensadores que han aportado diversas perspectivas, enfoques claves que deberían ser considerados para el concepto actual. Filósofos como Aristóteles, aunque no se refería al concepto de salud mental, como lo conocemos hoy, abordó la idea desde una perspectiva holística que considera la salud general del individuo, incluyendo aspectos físicos, emocionales y sociales. Desde su filosofía se refería a un equilibrio de la armonía, la razón, las emociones, las acciones. Considerando que la virtud es elemento esencial de una buena vida, implica vivir de acuerdo con la virtud alcanzar el desarrollo pleno de las capacidades humanas. También lo relaciona profundamente con el propósito la realización personal dentro de un contexto social ético.Pensadores como Viktor Frank y Jean Paul Sartre abordan la importancia del significado de la autenticidad en la vida, para ellos la salud mental está relacionada a la capacidad de encontrar propósito de vida, enfrentar la libertad la responsabilidad personal. Friedrich Nietzsche, aunque no es reconocido por contribuir a la salud mental en el sentido clínico, ha influido en la filosofía y la psicología con sus ideas sobre la voluntad del poder, el sufrimiento la superación personal.
Sus reflexiones en torno a la salud mental se pueden interpretar a través de la forma en que abordó la experiencia humana, el dolor, la búsqueda de sentido. Para Nietzsche el sufrimiento era parte esencial de la existencia, el enfrentarlo y darle forma podía llevar al crecimiento personal. Su concepto de superhombre se relacionaba con la idea de trascender a las limitaciones y encontrar un propósito más profundo de la vida lo que puede ser relevante para el bienestar mental. Su trabajo invita a la reflexión sobre como nuestras experiencias, incluso las dolorosas pueden contribuir a nuestro desarrollo personal y a nuestra salud psicológica. Su enfoque de autoconciencia y responsabilidad personal me parece puede aportar mucho en tiempos actuales de la salud mental.
Concluyendo el concepto de salud mental con las diferentes corrientes filosóficas, puede explicarse como un estado de bienestar integral que incluye el desarrollo personal, el significado de la vida, el equilibrio emocional y el apoyo social.
Sus reflexiones en torno a la salud mental se pueden interpretar a través de la forma en que abordó la experiencia humana, el dolor, la búsqueda de sentido. Para Nietzsche el sufrimiento era parte esencial de la existencia, el enfrentarlo y darle forma podía llevar al crecimiento personal. Su concepto de superhombre se relacionaba con la idea de trascender a las limitaciones y encontrar un propósito más profundo de la vida lo que puede ser relevante para el bienestar mental. Su trabajo invita a la reflexión sobre como nuestras experiencias, incluso las dolorosas pueden contribuir a nuestro desarrollo personal y a nuestra salud psicológica. Su enfoque de autoconciencia y responsabilidad personal me parece puede aportar mucho en tiempos actuales de la salud mental.
En resumen, la salud mental se refiere al bienestar emocional, psicológico social de una persona. Abarca como pensamos, sentimos actuamos, también como manejamos el estrés, como interactuemos, nos relacionamos con los demás como tomamos decisiones.
El compliance o cumplimiento, en el marco de la salud mental se refiere a la adherencia, apego a tratamientos, recomendaciones mejores prácticas que promuevan el bienestar psicológico, como las organizaciones promueven la salud mental de los individuos, así como una mejor convivencia y bienestar psicológico.
Compliance también involucra el promover una cultura que priorice la salud mental, incluyendo integrar herramientas, regulaciones, terapias, actividades de autoayuda como también seguir pautas recomendadas por profesionales de la salud.
La relación entre salud mental y compliance es fundamental, una buena salud mental puede facilitar el cumplimiento de las recomendaciones de salud, pero también permite facilitar el cumplimiento en todas las áreas de la organización fortaleciendo el desarrollo humano, la calidad de vida de las personas, se puede fortalecer el cumplimento de objetivos mejorar la toma de decisiones empresariales.
Ambiente Laboral
Pongamos como una de las prioridades de la salud mental en el ambiente laboral, un buen programa de compliance contribuye a un ambiente laboral saludable. Donde las personas o colaboradores se sientan seguros y protegidos, la falta de cumplimiento normativo puede generar estrés ansiedad en los empleados y afectar la calidad de vida de las personas.
Prevención de Riesgos en salud mental en los sistemas de gestión de compliance o programas de compliance ayudan a prevenir y mitigar riesgos que puedan afectar la salud emocional, física, psicológica y social de los empleados, como el acoso laboral, la discriminación así como otras conductas que distorsionan las buenas relaciones de convivencia, desasociar, dividir, juzgar, criticar, establecer posturas radicales como el tomar conductas que lastimen emocionalmente a las personas de entre los integrantes afecta la salud mental de las comunidades y organizaciones en general. Para ello un programa de compliance debe contemplar:
Las políticas de bienestar. Las organizaciones deben adoptar políticas de bienestar que se alineen con los principios de compliance. Esto incluye no solo fomentar programas de apoyo, sino cuidar las conductas en el grupo que no lesionen ni lastimen en bienestar emocional que por desconocimiento de su impacto pueden causar un daño en una persona en específico o en toda una organización en general, no solo dañando su reputación sino causando un daño a la persona que genera, ello llega a tener un efecto lento, pero a la larga destructivo.
Cultura Organizacional. Fomentar una cultura de cumplimiento más allá de las regulaciones fundamentos legales que la regulen o no, sino por dar prioridad a bienestar emociona, social, psicológico del individuo persona, creando apertura comunicación, apoyo de la salud mental de una persona para toda una comunidad.
Regulaciones y Responsabilidades en algunos sectores, existen regulaciones que exigen el bienestar mental de los trabajadores especialmente en algunos sectores como el manejo de máquinas, actividades de comunicaciones transportes, reguladores aéreos, en los que un problema de salud mental puede derivar en una afectación no solo individual sino una catástrofe. Por ello cumplir con estas normativas no solo es legalmente obligatorio sino también éticamente responsable aun cuando en el sector económico, actividad profesional, no implique el uso de equipos especializados, la toma de decisiones en toda organización involucra la salud mental del individuo independiente del nivel de responsabilidad o jerárquico dentro de una empresa pública o privada.
Seguimiento y evaluación. Implementar mecanismos de seguimiento y evaluación para asegurarse de que las políticas de salud mental se estén cumpliendo puede ser parte de un sólido programa de compliance fomentando organizaciones más saludables, productivas y eficientes.
Intervención. Es necesario identificar en primer lugar la existencia de acciones o actividades de bullying, es necesario que haya la posibilidad de abordar las quejas de manera justa confidencial, asegurando la protección de las víctimas y la rendición cuentas de los agresores. Ello puede tener un impacto profundo y duradero en las organizaciones, por lo que su atención y resolución son esenciales para mantener la salud organizacional y el bienestar de todos los involucrados.
Es común observar el bullying en las organizaciones no lucrativas, al igual que cualquier entorno laboral, este concepto se refiere a prácticas de acoso hostigamiento entre integrantes. Este fenómeno puede manifestarse entre comportamientos como intimidación, menosprecio, exclusión social, difamación como también el murmullo o chismorreo, hasta comprender la existencia de la agresión verbal o física.
Esta conducta causa un fuerte daño a la salud mental e impacto al ambiente laboral y en las organizaciones, creando un ambiente tóxico que afecte la moral de los empleados o integrantes, reduce la productividad, conlleva a un aumento del ausentismo, la no participación como falta de motivación. Las consecuencias en las víctimas de bullying los lleva a experimentar efectos graves en la salud mental, incluyendo estrés, ansiedad, depresión como disminución de la autoestima.
Para prevenir y manejar el bullying, es necesario que las organizaciones implementen políticas claras de respeto y colaboración, esto incluye capacitación sobre los efectos del bullying y promover la comunicación entre colaboradores
La salud mental en las organizaciones no lucrativas como en la sociedad en general deben fomentar la paz, al fomentar la salud mental también se genera el bienestar social de una comunidad, un país o un grupo. Lo mismo ocurre en una comunidad, asociación no lucrativa, colegios de profesionales, agrupaciones sindicales, ONGs, donde las personas respiran un ambiente de armonía, honestidad, ética,respeto a diferentes ideologías, apego adherencia a normas, mejores prácticas, como a códigos de ética, políticas, procedimientos, donde se respeta diversidad de formas de pensar y de ser, donde no existe malestar emocional, donde se privilegia respeto, una buena convivencia, se promueve la salud mental desde la consciencia, el bien común, la comprensión, el amor al prójimo, la mejora de la calidad en la convivencia social, sin duda contribuirá a mayor adhesión y en consecuencia mayor colaboración.
Situaciones de bullying, acoso laboral, discriminación, acciones violentas o aplicando castigos de no comunicación, exclusión social o cualquier tipo de violencia psicológica como gossiping (chisme o chismorreo) una práctica de hablar de manera negativa de los compañeros para crear divisiones, generar desconfianza o dañar la cohesión del grupo genera problemas de salud mental en las personas que integran las organizaciones.
El cumplimiento normativo y la salud mental están estrechamente relacionados en las organizaciones, integrar prácticas que fomenten la salud mental debe ser parte de los sistemas de gestión de compliance o programas de compliance en las empresas, la salud mental es fundamental para fomentar el bienestar de los empleados y contribuye a una mejor toma de decisiones empresariales y mayor productividad como también a mitigar riesgo reputacional, operacional como de incumplimiento normativo.Regulaciones y Responsabilidades en algunos sectores, existen regulaciones que exigen el bienestar mental de los trabajadores especialmente en algunos sectores como el manejo de máquinas, actividades de comunicaciones transportes, reguladores aéreos, en los que un problema de salud mental puede derivar en una afectación no solo individual sino una catástrofe. Por ello cumplir con estas normativas no solo es legalmente obligatorio sino también éticamente responsable aun cuando en el sector económico, actividad profesional, no implique el uso de equipos especializados, la toma de decisiones en toda organización involucra la salud mental del individuo independiente del nivel de responsabilidad o jerárquico dentro de una empresa pública o privada.
Seguimiento y evaluación. Implementar mecanismos de seguimiento y evaluación para asegurarse de que las políticas de salud mental se estén cumpliendo puede ser parte de un sólido programa de compliance fomentando organizaciones más saludables, productivas y eficientes.
Intervención. Es necesario identificar en primer lugar la existencia de acciones o actividades de bullying, es necesario que haya la posibilidad de abordar las quejas de manera justa confidencial, asegurando la protección de las víctimas y la rendición cuentas de los agresores. Ello puede tener un impacto profundo y duradero en las organizaciones, por lo que su atención y resolución son esenciales para mantener la salud organizacional y el bienestar de todos los involucrados.
Es común observar el bullying en las organizaciones no lucrativas, al igual que cualquier entorno laboral, este concepto se refiere a prácticas de acoso hostigamiento entre integrantes. Este fenómeno puede manifestarse entre comportamientos como intimidación, menosprecio, exclusión social, difamación como también el murmullo o chismorreo, hasta comprender la existencia de la agresión verbal o física.